De la Hoz solicita al PSOE de Castilla y León que “pida perdón” por “decencia” por “las calumnias” en el caso primarias

El portavoz del Grupo Popular en las Cortes de Castilla y León y vicesecretario de Comunicación del PPCyL, Raúl de la Hoz, solicitó a los dirigentes de la oposición socialista que, como no van a dimitir, por “decencia pidan perdón” por sus “calumnias, insultos y vejaciones” vertidas contra los populares desde el año 2019 por el caso primarias.

Durante una rueda de prensa, tras el archivo de la causa abierta contra el PP de Salamanca al no ver financiación ilegal ni donaciones en el pago de cuotas pendientes a afiliados para que pudieran participar en las primarias, De la Hoz elevó la petición que ya realizó el pasado sábado el presidente del PPCyL y de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, cuando demandó a los “sanchistas” que pidan disculpas por las acusaciones en este caso.

El dirigente popular, después de recordar que en 2019 se presentó “de forma sorpresiva” la denuncia en la que se acusó al Partido Popular de supuestos delitos vinculados a la corrupción y financiación ilegal, manifestó que su partido siempre ha expresado respeto al trabajo del Juzgado y ahora a la resolución que sobresee la causa.

“Hemos tenido que soportar todo tipo de insultos, calumnias y vejaciones”, expuso De la Hoz, que recordó las peticiones de dimisión del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, y del presidente del PP de Salamanca y de la Diputación, Javier Iglesias, por parte de los socialistas, formuladas tanto en las Cortes como en la corporación provincial y ayuntamiento salmantino.

En ese punto, reseñó las manifestaciones de dirigentes socialistas, que están en el Diario de Sesiones de las Cortes, entre ellas que “Mañueco lleva al banquillo a Génova”, “la corrupción de Mañueco es su legado en Castilla y León” o “usted (Mañueco) es un tramposo, acusado de financiación ilegal”.

“Si tuvieran un mínimo de vergüenza se irían todos a su casa”, opinó el popular, convencido de que no van a dimitir, ni él se lo pide, aunque sí arremetió contra su forma de hacer oposición por utilizar la corrupción ante su “falta de capacidad” y de gestión en su vida laboral, así como por “estar apoltronados en la oposición”.

En tal sentido, siguió con la critica de que “ni son serios, ni responsables, ni se tienen respeto” y concluyó en que, como no van a dimitir, al menos por “decencia” deben “pedir perdón a los ciudadanos de Castilla y León por la desgraciada imagen que ofrecen de la política” de esta Comunidad.