Herrera llama a combatir el voto de castigo y “dar la cara” ante el disgusto social

El presidente del PP en Castilla y León, Juan Vicente Herrera, llamó hoy a los cargos de su partido a combatir el voto de castigo y la abstención en la campaña electoral de las elecciones europeas del 25 de mayo, así como a “dar la cara” ante el “disgusto social” por las medidas de austeridad aplicadas por el Gobierno central, que defendió porque “algo se mueve” y no se puede parar la “incipiente” recuperación económica.

En su intervención ante los miembros de la Ejecutiva autonómica, presidentes provinciales y responsables de los equipos de campaña, en un acto en el que presentó el programa regionalizado y los ejes que defenderá Castilla y León en Europa, Herrera instó a los ‘populares’ a dirigirse a las personas que les votaron en las elecciones autonómicas, municipales y generales de 2011, con respeto, pero con orgullo, para recuperar ese respaldo, desde una “gran movilización”, y volver a ganar en la Comunidad.

“Hay que insistir en la importancia de Europa, en lo que nos jugamos y participar”, espoleó el presidente de la Junta, que rechazó que los comicios europeos se presenten como la ocasión, por unos, para dar un voto de castigo al PP y expresar el “disgusto social” por las políticas del Gobierno. “No se puede frivolizar, nos jugamos mucho”, recalcó.

Desde el respeto, sin complejos, con la cabeza alta y las manos limpias, reclamó a los cargos de su partido que insistan en lo que España y Castilla y León se juega en las próximas elecciones europeas y en la explicación, para solicitar el voto, de unas “políticas antipáticas y duras” que van a permitir cambiar el rumbo y “pasar el Rubicón” de la crisis a la recuperación.

En esa explicación, en la que insistió a lo largo de su intervención en la sede del PP de Castilla y León, solicitó que digan que no están “avergonzados” de las medidas adoptadas por el Gobierno central y el autonómico y subrayó que el 25 de mayo se deberá optar por dar continuidad a esas políticas, que calificó como las de la “incipiente recuperación”, o por “empecinarse en las de la nostalgia que trajeron la ruina”, en referencia a los socialistas.

Herrera pidió a su partido que insista en que “Europa es más que la leyenda de los hombres de negro” -en referencia a la Troika-, que es una cultura, una civilización, un espacio sin fronteras, de pasaporte único, de la moneda única, de la garantía de las pensiones, de una tarjeta sanitaria única o de la movilidad de las becas Erasmus y del proyecto universitario de Bolonia.

Además, subrayó que el 70 por ciento de las decisiones que se adoptan en Europa afectan al día a día de los ciudadanos de los países que forman la Unión y apuntó incluso, en clave interna, a que es también un espacio de integración, no de ruptura, ante el pulso a la unidad política del país por parte de los nacionalistas catalanes, a los que recordó que es “muy complicado” abandonar la Unión Europea.

En clave doméstica, el presidente de la Junta subrayó que Castilla y León ha convergido en 30 puntos desde la entrada de España en la Unión Europea y que el once por ciento de los presupuestos de la Comunidad proviene de los fondos estructurales, además de las ayudas de la PAC, de las que se benefician 94.000 agricultores y ganaderos. “Europa es un proyecto para las personas”, defendió.

Algo se mueve

Herrera marcó el escenario de esta cita electoral en los efectos de los seis años de “durísima” crisis desde el punto de vista social, de empleo e incluso demográfica, en la desapación de la “alarma” de 2012 cuando se hablaba del rescate de España y de la actual mejora de las previsiones económicas, que dan un “leve crecimiento” en 2014 y un 2 por ciento en 2015.

Sin especular ni ser frivolos en esos datos y desde la prudencia, por el elevado número de personas y “paisanos” de la Comunidad en el paro, el presidente animó a que “no pase desapercibido” en este momento que en abril de 2013 había 17.000 parados más en Castilla y León y en el mismo mes de este año son 15.000 los desempleados menos, según la última EPA. “Algo se está moviendo”, insistió.

Aun así, solicitó que se mantengan los “pies en el suelo” y no se pierda la realidad ante el número de 234.133 “parados, paisanos, amigos y ciudadanos que quieren trabajar y no pueden”. Por ello, instó a esforzarse por consolidar los “buenos datos” para “cruzar la frontera dando sentido a los sacrificios” exigidos a los ciudadanos.

El presidente reclamó también a los cargos de su partido que den la cara ante el disgusto de los ciudadanos por los recortes aplicados, a lo que unió la “alarma y el descrédito” de la política y de los políticos por los casos de corrupción, que estimó como una de las causas de la abstención, aunque advirtió en ese ejercicio de “dar la cara” no van a encontrar ni confianza ni receptividad, pero añadió que “no se puede esperar otra cosa”.

Los que niegan la recuperación

Herrera arremetió contra los que no vieron o no quisieron ver la crisis y ahora niegan la recuperación, en referencia a los socialistas, a quienes censuró que digan que lo peor está aún por llegar. “Es patético”, calificó, para añadir que “no pueden dar lecciones” ante su “falta de vergüenza torera”, que consideró que van a pagar caro, por relativizar los datos de la salida de la recesión y no reconocer el sacrificio de la sociedad.

El presidente definió como “magnífico candidato” a Miguel Arias-Cañete y cargó contra la cabeza de cartel del PSOE, Elena Valenciano, por poner como modelo Andalucía, cuando tiene un paro del 35 por ciento, algo que tildó de “metedura de pata”, igual que su discurso en París cuando poco después el Gobierno socialista del presidente Hollande ha aplicado medidas de ajuste. “No es igual una política que otra, ni unos políticos que otros”, advirtió.

Por último, reclamó a su partido que reivindique la centralidad del proyecto del PP para mantenerse en ese espacio de moderación y de centro político, y, en su llamada a combatir la abstención, llamó a una reflexión sobre el “desastre democrático” que sería que en unas elecciones locales, autonómicas o generales sólo votara el 45 por ciento de la población como ocurrió en España las últimas europeas y un 52 en Castilla y León. “Hay que combatir también ese desastre para que no ocurra en las elecciones europeas”, aseguró.