El presidente del PP en Castilla y León, Juan Vicente Herrera, defendió hoy que a Europa “no puede ir cualquiera” y que no se puede “ir sin conocimiento”, como cree que ocurrió con “ministros ineptos” del Gobierno socialista, animó a combatir la abstención y rechazó el canto de quienes hablan de un voto de castigo o de dar el apoyo el 25 de mayo a “experimentos extrafalarios”.
Herrera reiteró la importancia de las elecciones europeas por los asuntos que se deciden y afectan a los ciudadanos de España y de Castilla y León, donde se centró en la negociación de la PAC llevada por el entonces ministro de Agricultura y ahora candidato a las europeas, Miguel Arias-Cañete. “Europa es un ámbito de exigencia, hay que ir a negociar en defensa de los intereses de España, no puede ir cualquiera”, afirmó, para elogiar el papel que tuvieron en su día José María Aznar, Loyola de Palacio y hoy Mariano Rajoy y Cañete.
En una intervención más corta de lo habitual, ante casi 2000 personas que siguieron el mitin en la Cúpula del Milenio de Valladolid, con presencia de ‘populares’ de las nueve provincias, Herrera arremetió contra quienes no quisieron ver la crisis, no quisieron o no pudieron tomar medidas y ahora tienen la “desfachatez” de no reconocer la recuperación, en referencia a los socialistas.
“No se puede permitir que nadie desprecie ni desbarate el esfuerzo para salir de esta crisis”, defendió, para rechazar el voto de castigo, que sería a «nosotros mismos», o el apoyo a opciones que tildó de “extravagantes”. Por ello, estimó que el 25 de mayo se deberá optar por consolidar la recuperación en “contra de quienes causaron tanto daño, niegan la recuperación y desprecian los sacrificios”, valoró.
Herrera consideró que pueden dar una “cumplida explicación” de las medidas adoptadas tanto por el Gobierno central como por el autonómico, que, aunque añadió que no eran las que les gustaban, eran imprescindibles y se han tomado con “criterios de justicia”. El presidente manifestó que podían haber optado por “deslizarse” por el camino del “capricho y la frivolidad”, como cree que hicieron los socialistas.
En su defensa de las reformas, señaló que se hizo por la solvencia de las cuentas públicas, en apoyo del empleo, del sistema financiero y de las políticas sociales, de las que afirmó que se ha preservado su núcleo central, para citar como en Castilla y León se mantiene la calidad de la sanidad, educación, servicios sociales y dependencia.
“Eso nos jugamos el 25 de mayo”, subrayó, para dirigirse a Rajoy, a quien dijo que está en su tierra, y asegurar que en Castilla y León el PP “trabaja bien y no va a fallar”. “Hay que convertir el voto responsable y de futuro en el voto al PP”, concluyó, convencido de ganar en la Comunidad y contribuir al triunfo de los populares en España y en Europa.